Siderodromofobia
Etimología | Causas | Síntomas | Tratamiento | Fobias relacionadas
La siderodromofobia es el miedo irracional y desproporcionado a trenes, ferrocarriles, vías férreas o a viajar en tren.
Las personas que sufren esta fobia pueden experimentar ansiedad al subirse al vagón de un tren, al pasar sobre las vías ferroviarias o incluso al escuchar el silbido de la locomotora.
Etimología
La etimología de la palabra siderodromofobia proviene del griego:
- Sidero: hierro o férreo
- Dromo: circuito o lugar donde se hacen carreras
- Phobos: miedo o temor
Causas
La causa principal de la fobia a los trenes suele ser el miedo a tener accidente ferroviario, ya sea al descarrilar los vagones de este medio de transporte o debido a un choque frontal entre dos locomotoras.
Habitualmente este temor aparece tras haber sufrido un incidente traumático que puede incluir:
- Vivir un accidente de locomoción
- La muerte de un ser querido debido a un fallo ferroviario
- Tras ver un accidente con víctimas graves en las noticias o en vivo.
- Al vivir un evento en un tren que si bien no es peligroso, es percibido como tal.
Otra causa importante del miedo irracional a los trenes es lo que se conoce como el síndrome del pasajero.
Al igual que ocurre con la aerofobia (miedo a volar en avión), es habitual que la persona que sufre este trastorno tema la falta de control sobre la situación, depender de la habilidad de un desconocido para conducir el vehículo, o el propio hecho de no poder bajar hasta la siguiente estación.
Síntomas
Los síntomas de la siderodromofobia son los mismos que los de otros trastornos de ansiedad, pudiendo incluir ataques de pánico, respiración acelerada, aumento de la frecuencia cardíaca, dolor de cabeza o de estómago, sudores o incluso temblores.
Dependiendo de la gravedad de esta fobia, es posible que estos síntomas sólo se activen al viajar en tren, o por el contrario pueden aparecer sólo con acercarse a una estación ferroviaria, al oír el silbato de un tren de cercanías, o incluso al ver un ferrocarril en televisión.
También es habitual que las personas que sufren este miedo, experimenten ansiedad al cruzar las vías del tren, ya sea andando en coche.
Tratamiento
La siderodromofobia, al igual que otras fobias específicas, responde muy bien al tratamiento psicológico.
Para tratar esta fobia usualmente suele utilizarse:
- Terapia de tipo cognitivo conductual: se trata del tipo de terapia más recomendada por los psicólogos para superar las fobias. En ella, el psicólogo ayuda al paciente a identificar y modificar sus ideas irracionales.
- Aprendizaje de técnicas de relajación incluyendo habitualmente ejercicios de respiración o relajación muscular progresiva (relajación de Jakobson).
- Terapia de exposición, pudiendo ser en vivo, aunque actualmente se usan más la terapia con realidad virtual mediante entornos que simulan la llegada a la estación de tren y el viaje en vagón hasta llegar al destino.
Muchas personas que sufren siderodromofobia optan por no buscar tratamiento para su fobia, evitando viajar en tren y cruzar cualquier tipo de raíles o vías de tren.
Fobias relacionadas
Al hablar de fobias relacionadas, es útil clasificarlas según dos tipos:
Miedo a viajar en tren
Existen dos fobias principales que pueden producir ansiedad al viajar en tren o metro:
- Claustrofobia: en el caso de esta fobia, el miedo viene provocado por sentirse atrapado y no poder salir o bajar del vagón hasta llegar a la próxima estación de tren.
- Agorafobia: en el caso de la agorafobia, el factor principal suele ser el temor a tener un ataque de ansiedad dentro del tren y a hacer el ridículo o no recibir la ayuda adecuada.
Para diferenciar estos miedos de la siderodromofobia, ten en cuenta que en ambas fobias el miedo no es producido por el ambiente ferroviario en si mismo, ni por la posibilidad de tener un accidente, sino que están más relacionadas con la falta de control de la situación y no poder salir del vagón hasta la siguiente estación.
Fobias relacionadas con vehículos
Dentro de las fobias a otros medios de transporte destacan:
- Amaxofobia: miedo a conducir o a ir en coche
- Aerofobia: miedo a volar en avión
- Talasofobia: fobia al mar incluyendo viajar en barco
- Ocofobia: fobia a los vehículos en general
- Motofobia: miedo al sonido del motor de una motocicleta que se aproxima
- Ciclofobia: fobia a las bicicletas